El Sindicato Único de Burgos de la Confederación General del Trabajo se une públicamente a las numerosas manifestaciones de rechazo, que han recibido las terribles declaraciones de Roberto Da Silva, ex presidente de la IGP Morcilla de Burgos, respecto de las víctimas del fascismo y la represión franquista, de sus familiares y del conjunto de personas que trabajamos para la recuperación y reparación de la memoria histórica.
CGT ha estado y estará siempre al lado de los colectivos de memoria histórica
Compartimos el sentimiento de indignación y dolor, que este tipo de acusaciones y reproches, basados en un pretendido fin lucrativo de los colectivos de memoria histórica, causan en las víctimas, sus familias y el conjunto de la sociedad burgalesa. Cierto es que este señor ha pedido perdón, pero no por ello, dejamos de señalar a quien contribuye a fomentar opiniones que faltan a la verdad, y que ignoran los sentimientos de quienes únicamente aspiran a recuperar la dignidad que en el pasado les fue arrebatada.
CGT ha estado y estará siempre al lado de los colectivos de memoria histórica, y luchará por que la reparación y la justicia triunfen, frente a los discursos de odio y de legitimación del fascismo. Y por ello, queremos volver a trasladaros nuestro apoyo y comprensión, ante cualquier situación de violencia verbal o de ataque mediático, que merecen toda nuestra repulsa.
El Secretariado Permanente de nuestro Sindicato, en nombre de todo el conjunto de la organización, os transmite su más sincera comprensión, compañerismo y amistad.
Salud. Frente al fascismo solo cabe decir ¡No pasarán!