Las organizaciones sindicales CGT Y CNT en el ámbito de Burgos, acuerdan la convocatoria de huelga conjunta para el 29 de marzo contra la reforma, los recortes y el pacto social.
Desde ambas organizaciones rechazamos cualquier negociación sobre los derechos conquistados por la clase trabajadora en años de lucha, por ello entendemos que el objetivo prioritario de la huelga ha de ser la derogación inmediata del conjunto de la reforma laboral, que constituye en su totalidad una agresión frontal contra los derechos y las condiciones de vida de la clase trabajadora y que continúa, a pasos agigantados, por la senda marcada por el anterior gobierno que ya dejó un rastro de recortes en pensiones, servicios públicos, salarios en la administración, reforma laboral en 2010...
Exigimos que se ponga fin a una política económica diseñada para que los trabajadores y trabajadoras paguen la crisis de la banca y de la patronal, que ha conducido a una cifra intolerable de parados y paradas que no deja de crecer y a un empobrecimiento y empeoramiento de las condiciones de vida de la clase trabajadora.
Rechazamos el acuerdo por el empleo y la negociación colectiva alcanzado por CCOO y UGT el pasado mes de febrero, además de las enmiendas presentadas por estos sindicatos al trámite parlamentario de la reforma, rechazándolos como alternativa válida, ya que comparte el espíritu de la reforma y asume la lógica de la patronal y el gobierno, asumiendo que la salida de su crisis debe realizarse mediante cesiones en los derechos de los trabajadores, colocando de partida a la clase trabajadora en una posición de debilidad. La misma lógica ya llevó a estos sindicatos a aceptar el retraso de la edad de jubilación a los 67 años, tras la huelga general del 29-S.
La Huelga del 29 de Marzo debe ser sólo el inicio de un proceso de movilización creciente y sostenido, que incorpore al conjunto de la clase trabajadora y a los sectores más desfavorecidos y afectados por la crisis capitalista, hasta poner freno a la dinámica de agresión constante a nuestros derechos, poniendo las bases para la recuperación y conquista de nuevos derechos sociales en el marco de una profunda transformación social.
Con la convocatoria que tanto CGT como CNT hemos realizado, queremos dar cobertura a todos los que apuestan por una confrontación real y continuada, para devolver las agresiones contra la clase trabajadora con el mismo grado de contundencia con el que las estamos recibiendo.
Consideramos que el rechazo frontal con la política y el modelo sindical de las burocracias de CCOO y UGT y su descrédito en amplios sectores de los trabajadores no deben convertirse en excusas contra la movilización y la lucha, sino en acicates para reforzarla. Ante agresiones de la magnitud de las que estamos sufriendo, la unidad de los trabajadores es fundamental, unidad que se tiene que manifestar desde la base, desde las asambleas en los centros de trabajo y en los barrios, en las movilizaciones y en los piquetes hasta hacer de la movilización contra los responsables y beneficiarios de esta situación: la patronal, la banca y el gobierno, una dinámica imparable que levante una barrera contra las tentaciones de convertir los derechos de todos en moneda de cambio de nadie.
Es hora de que todos, trabajadores y trabajadoras, en paro o en activo, jubilados, sumergidas, estudiantes o precarios, digamos basta, tomemos la calle para no abandonarla hasta hacer valer nuestra fuerza y nuestra reivindicaciones.